¿Os acordáis del episodio de Gossip Girl en que Blair completamente enfadada le dice a un grupo de empollones universitarios que las chanclas no son zapatos? Al final, los chicos no le hacen ni caso y ella se frusta por la falta de estilo en su ambiente universitario.
Lo cierto es que con el verano a las puertas en Barcelona ya está empezando a haber una invasión por las calles de estos no zapatos. ¿Qué podemos hacer contra ello?
La verdad es que cualquier outfit queda estropeado cuando en lugar de unos zapatos se llevan unas chancletas de plastico.
Se supone que este tipo de calzado tiene su origen en las sandalias usadas en Japón. Las chancletas son probablemente el calzado más simple conocido que deja los pies casi totalmente al descubierto; por ello, resultan ser las ideales para estar en la playa en la lucha contra el calor pudiéndose mojar al ser de plastico.
Por otro lado, dada su simplicidad y bajo coste, en los países subdesarrollados con frecuencia las utilizan las clases sociales más pobres como si fuese un calzado al ser una mejora contra los pies descalzos.
A finales de los años noventa las chancletas se pusieron de moda y actualmente hay muchas marcas (entre estas las famosísimas Havaianas) que cada año lanzan sus colecciones con nuevos colores y fantasías según las tendencias.
La clase media y alta de la sociedad han empezado a llevar las chancletas debajo de indumentaria que no fuese de playa representando una roptura de esquemas y una rebelión contra las etiquetas.
Los podólogos desaconsejan su uso, el pié está demasiado expuesto, la suela es demasiado baja, el material hace sudar los pies, la suela es totalmente plana y por eso incomoda; y además la estética es fea.
Hay miles de sandalias que dejan el pié fresco, que son ideales para los días de verano y son esteticamente bonita por eso
¿Por qué no limitamos la utilización de las chanclas a las áreas muy cercanas a las playas y le damos a las calles de Barcelona el glamour que se merecen ?