En la coqueta calle Enrique Granados del eixample barcelonés se sitúa un restaurante que se ha convertido en referencias por la calidad de sus carnes, destacando por su propuesta gastronómica basadas en productos 100% ecológicos, estacionales y de proximidad certificados desde el 2012 con el sello Slow Food Kilómetro 0.
Después del restaurante La Burg, un local abierto desde hace más de tres años con el objetivo de dignificar la hamburguesa, de la mano de los mismos propietarios nace El Filete Ruso. El Filete Ruso es un restaurante que se propone de recuperar los sabores auténticos usando para sus platos productos de km cero respetando la filosofía del movimiento slow food.
Este local elegante en su sencillez con mesas de maderas y un ambiente muy acogedor debe su nombre propiamente al guiño que hace su cocina a los platos tradicionales de toda la vida, en la época de Franco así se llamaba el filete nacional de carne picada empanada y rebozada
La cocina del Filete Ruso es buena, limpia y justa en el sentido que sus platos están realizados con ingredientes ecológicos trazables comprados directamentes al proveedor.
Debido a esto evidentemente cada temporada sus propuestas gastronómicas van cambiando, para la temporada invernal el restaurante “El Filete Ruso” propone una carta estacional pensada para los climas más fríos con “la nueva hamburguesa de caza”, una Hamburguesa de jabalí con huevo frito, queso de pastor, compota de manzana y chips de alcachofa que se presenta juntos con otros platos como novedad de la temporada.
Además de la apetitosa Hamburguesa de jabalí se añade a la carta una hamburguesa especial de carne de entrecot de ternera eco con huevo poché, trompetas de la muerte, y sal de hierbas mallorquinas. Entre otros platos Km 0 de invierno, nos presenta también una sopa de cebolla eco, y una ensalada de calçots, bonito de proximidad, coca de espelta, Kamut y escarola.
