Una de las últimas novedades en maquillaje es el contouring, una técnica que está arrasando y viendo los resultados que se consiguen no nos sorprende. Con el contouring podemos esconder aquellos defectos de nuestras facciones que tan poco nos gustan, caras demasiado largas o demasiado redondas y narices grandes por fin tienen su maquillaje a medida.
Este arte de esculpir el rostro y resaltar las facciones disimulando las imperfecciones llega de manera fácil a nuestro beauty case con Master Sculpt, una novedad presentada por Maybelline que reúne por primera vez en una práctica paleta todo lo necesario para conseguir este efecto mágico.
El contouring es un procedimiento de maquillaje que consigue sacar el mayor partido a nuestras facciones escondiendo pequeños defectillos y ayudándonos a lucir nuestra mejor cara, todo esto gracias a un correcto uso de sombras y luces en el maquillaje en función del tipo y de la forma del rostro. Por eso, para su correcto uso, se establecen primero zonas de luz y de sombras según el rostro. En esta primera fase del contouring se establece la modalidad de maquillaje para contornear rostro.
En la pallette Master Sculpt, encontraremos dos tonalidades (01 Medium Light y 02 Medium Dark) a escoger según nuestro color de piel. Una clara que usaremos en las zonas que queremos iluminar y una más oscura para las zonas en la que queremos crear sombras. Maybelline para ayudarnos a sacarle el máximo partido a la técnica del contouring nos indica cómo maquillar tu rostro según la forma de la cara. Toma estos consejos como punto de partida para luego adaptarlos a tu cara y así esconder los pequeños defectos con luces y sombras.
- Cara alargada
Si tenemos una cara alargada, nuestro objetivo será acortarla, por lo que tenemos que dar un brochazo en la línea de nacimiento del cabello y sobre la barbilla, trabajar el pómulo en horizontal, desde la oreja hasta la mitad de la mejilla para “cortar en dos” el rostro y dar una sensación de rostro más pequeño. - Cara redonda
Si tenemos un rostro redondo, nuestro objetivo será afinarlo, por lo que tenemos que marcar desde la mitad de la mejilla hacia las sienes de modo ascendente. - Cara ovalada
Si tenemos la cara ovalada, nuestro objetivo será disimularlo, por lo que tenemos que trabajar el pómulo en diagonal, desde la oreja hacia la mitad de la mejilla.
Independientemente del tipo de cara y de los defectos que se quieran disimular hay que tener en cuenta que el tono oscuro sirve para marcar y definir el rostro y el claro para realzar y dar luz; y la brocha para difuminar y conseguir un acabado natural. En rasgos generales, el tono oscuro se debe usar para potenciar la atención hacia el centro del rostro marcando sienes debajo del pómulo, la barbilla y a ambos lados de la frente bajando hacia las sienes. Mientras que con el tono claro se da luz en la frente, nariz, barbilla y pómulos.
https://youtu.be/wnYLFlkp2Rg
El procedimiento es muy sencillo, utilizaremos la brocha sólo para aplicar el tono oscuro, para marcar y definir. A continuación y para evitar que los colores se mezclen utilizaremos nuestro dedo dar luminosidad con el tono más claro.
Si estás en casa puedes usar alguna pequeña brocha que tengas para estos tonos claros, pero os aseguro que con las manos se hace muy sencillo.
Por último difuminamos con la misma brocha inicial los dos tonos y ya estamos listas para salir a triunfar con nuestro nuevo rostro más proporcionado, afinado y definido.
Otra de las ventajas es que está disponible en dos tonos para pieles claras y oscuras.
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