¿Quién ha dicho que para estar guapa hay que sufrir? Desde aquello ha pasado mucho tiempo, ahora hay firmas como Montibello que, gracias a la innovación cosmética, han convertido los rituales de belleza en verdaderas experiencias sensoriales, momentos especiales en los que, además de ponernos guapas, disfrutamos de sensaciones únicas.
Habíamos visto un adelanto de las texturas más experienciales de Montibello con el lanzamiento de su serum in cream Arude, una crema para pieles muy necesitadas que, tras ser trabajada en la piel, cambia de textura convirtiéndose en un serum, un potente dos en uno que combina la cosmética con la sensorialidad.
Este producto ha sido solo el comienzo del que para Montibello Experience Beauty se ha convertido en una nueva forma de entender un ritual de belleza en el que, gracias a sus juegos de texturas y sus fragancias, todos los sentidos están invitados a participar, menos la vista para la que queda la felicidad de ver el resultado final tras salir del salón de belleza.
No era la primera vez que probaba un tratamiento Montibello, pero sí la primera desde esta importante revolución en la que se ha añadido la experiencia sensorial a los productos cosméticos y me he quedado realmente sorprendida, además de muy contenta con los resultados, aunque sobre esto no tenía dudas.
Evidentemente cada gama de cosméticos Montibello tiene su propio tratamiento y cada tipo de piel sus exigencias por eso muchas veces, a pesar de que pensamos de necesitar algo en concreto, la mejor opción es dirigirse a un profesional y que esta figura se encargue de escoger los varios pasos de nuestro ritual de belleza mezclando productos para diferentes exigencias si hace falta, tal como ha sido en mi caso.
El tratamiento empieza con un ritual de bienvenida que nos introduce en este sorprendente mundo sensorial, ya la limpieza de la cara es toda una experiencia, gracias sobretodo a su gel mousse mezclado con el tónico que se convierte en una espuma que se trabaja con pincel de brossage.
En mi caso seguimos con un cocktail de ácidos naturales frutales Alfa Hidroxiácidos (AHAs) a un ph de 3.5. Recuperar la apariencia saludable de la piel, remover las células muertas y estimular la formación colágeno y elastina era el primer objetivo de esta fase. Encima de este potente cocktail, la técnica formadora de Montibello que se encargó de realizarme el tratamiento, aplicó un producto de la línea Arude, el Resurfacing Factor. El RF está inspirado en la carboxiterapia y se encarga de oxigenar la piel a nivel superficie y a nivel profundo gracias a la efervescencia. Después de la aplicación del producto, notamos cómo se forman burbujtas en nuestro rostro, una sensación realmente extraña y sorprendente. Las burbujitas liberan una gran cantidad de oxígeno a nivel superficie activando un micromasaje exotérmico con calor desde fuera provocando una hiperemia y así activando la microcirculación sanguínea que aporta una gran cantidad de oxígeno y una gran cantidad de nutrientes a nivel celular profundo. De esta manera se ha conseguido activar la piel a nivel general, estimular la renovación celular y preparar nuestro rostro a una recepción óptima de los tratamientos.
Antes de retirar el producto se trabaja con pincel de brossage humedecido con tónico sumando así al peeling químico, un peeling mecánico para iluminar y aclarar la piel y dejarle una textura sedosa y brillante.
Mi tratamiento siguió con la mascarilla Purifing Multiactive Mask de la linea ReEquilibrium, una gama de productos especialmente indicada para pieles maduras impuras. Normalmente los productos para pieles mixtas son para pieles jóvenes, por eso esta gama es tan especial, un antiarrugas que controla la producción de sebo mientras trabaja la flacidez y lucha contra la polución. De hecho esta gama está especialmente indicada para las mujeres urbanitas que cada día están expuestas a las agresiones de la contaminación ambiental.
La mascarilla de la línea equilibrium también tiene un efecto efervescente y se encarga de purificar, extraer el exceso de grasa, mejorar a nivel superficie la piel y oxigenarla. Para acabar el tratamiento, un drenaje linfático para detoxificar, purificar, calmar y retexturizar la piel y crear un escudo protector contra la polución. El resultado ha sido estupendo, un ritual de belleza que es toda una experiencia y que me ha dejado la piel totalmente renovada.
Para realizar uno de estos tratamientos Montibello puedes acudir al salón New Look de Barcelona y dejarte sorprender con sus rituales sensoriales. Además que por sus innovativos tratamientos, Montibello este año está de enhorabuena ya que celebra su cincuenta aniversario. La firma española se fundó en 1967 con el objetivo de ofrecer a los profesionales de la peluquería y de la estética productos de calidad excepcional con los que diferenciarse de los más salones y destacar por su excelencia. Después de 50 años, los productos de Montibello están presentes en muchos países de Europa, América y Asia y a pesar de su éxito, los muchos reconocimientos y el gran crecimiento, en esta firma de belleza española que no para de innovar se sigue respirando la atmósfera familiar con la que comenzó hace 50 años. ¡Enhorabuena!
Para más info sobre Montibello y sus tratamientos: www.montibello.com