¿Eres todo un viajero pero aún no tienes claro cuál es tu medio de transporte favorito? Viajar es una experiencia que cada uno vive a su manera, y parte importante del mismo viaje es el medio de transporte que escogemos para llegar a nuestro destino. Cada vez más, el hecho de viajar en sí, se está convertido en una experiencia como cualquier otra. Para llegar a nuestro destino siempre contamos con diferentes opciones y a diario tomamos decisiones valorando la mejor combinación entre tiempo, gasto, comodidad y sobretodo nuestras preferencias.
La edad, las experiencias pasadas y la personalidad determinan gustos y prioridades que evolucionan viaje tras viaje, sobre todo en los trayectos largos, en los cuales los medios de transporte evolucionan proporcionando cada vez mejores experiencias turísticas.
Para llegar a una isla no hay color entre coger un ferry compartido con miles de personas o alquilar un velero entre un grupo de amigos, así como no es tampoco es lo mismo tomar un vuelo low cost y estar pendiente de los horarios de la compañía aérea y de sus infinitas limitaciones; o alquilar un jet privado usando aplicaciones de móvil como esta de JetApp, con el que podremos llegar a nuestro destino de manera memorable.
Las opciones de lujo que proporcionan un viaje exclusivo son sin duda las alternativas que más están evolucionando.
Es verdad que los consumidores somos cada vez más exigentes, pero el mercado no se ha quedado atrás respondiendo a esta creciente demanda de viajes exclusivos. Opciones que de podérnoslas permitir, son las más ideales. Pero no todos los bolsillos dan para eso, así que te dejamos nuestras recomendaciones para encontrar en tu día a día tu opción de viaje ideal:
Para soñadores, curiosos y atentos observadores:
Lo de mirar por la ventanilla es lo que nos gusta. Un viaje es la oportunidad de descubrir y observar todo lo que va pasando por delante durante nuestro trayecto, por lo que nuestro medio de transporte ideal según las distancias será el tren o el autobús. Claro que en los trenes de larga distancia el paisaje nos pasa por delante muy rápido, por lo que nuestro espíritu romántico será más agradecido con un viaje de trenes antiguos, estos que nos permiten incluso sacar fotos desde las ventanillas y observar cómo va cambiando el paisaje.
Para impacientes que tienen prisa por llegar:
No hay duda que lo más rápido para viajar es el avión, aunque dependiendo de las distancias, ya que en algunos casos se llega más rápido con un AVE, debido a que nos ahorra todo el protocolo que conlleva coger un avión. Para trayectos urbanos, lo más rápido siempre es el metro que no depende de los atascos, semáforos y todos los contratiempos que podemos encontrarnos en la superficie, claro está que ni de lejos tienen el encanto de subirse a un autobús y observar la ciudad casi a velocidad peatonal.
Para los espíritus libres:
Disfrutamos viajando a nuestro rumbo y casi no queremos llegar a nuestro destino porque lo que más nos apetece es conducir. Estar al volante es todo un disfrute y conducir nuestro coche o nuestra moto nos hace sentir libres. El coche y aún más la moto, es el medio de transporte ideal para no tener que depender de nadie, somos nosotros mismos quienes decidimos cuándo y dónde parar.
Para románticos:
Un viaje en barco es sin duda la opción más romántica. En velero, grandes barcos e incluso en los cruceros, el despertarse y mirar al infinito del mar tiene un romanticismo sin comparaciones.
