Tacones altos, noches de baile y dolor de pies. ¿Siempre es así? Pues no. Existen trucos para aguantar los tacones más altos durante horas, caminando, bailando o haciendo lo que se te apetezca. Estos trucos se basan en la protección del metatarso, que es zona que soporta gran parte del peso corporal cuando llevamos tacones de más de 6 cm.
La horma adecuada, la talla y los materiales correctos y el uso de plantillas de gel para tacones desmienten el dicho de que para estar bella hay que sufrir. Al menos, en lo referente al calzado, no es necesario maltratar los pies.
Consejos básicos para aguantar los tacones durante el día y la noche
Hay mujeres que eligen llevar tacones por un tema estético, y otras por comodidad. En algunos casos, el uso de tacones es una exigencia del protocolo o forma parte del uniforme de trabajo, como es el caso de las bailarinas profesionales. Lo cierto es que lucir tacones durante horas, de forma ininterrumpida y sin limitar la actividad física, no es ningún sueño si sigues los siguientes consejos:
- Elige el calzado correcto, es decir, de un material flexible y transpirable, con una buena horma y de la talla adecuada. Jamás elijas unos zapatos o sandalias que te aprieten, ni que te queden flojos.
- La buena sujeción del tobillo es la clave para evitar lesiones. ¿Te has fijado en que, en los concursos de bailes de salón, las bailarinas suelen llevar sandalias o zapatos muy abiertos, pero sujetos al tobillo? Una pulsera o un refuerzo en el talón aportan estabilidad y logran un caminar más armonioso, a la par que ligero.
- El tacón ancho ayuda a distribuir mejor el peso del pie. Los tacones de aguja y los de puntera estrecha son los que más castigan los pies, por sobrecargar los metatarsos y porque inducen la formación de juanetes, respectivamente.
- Aunque hayas elegido la talla correcta y con una buena horma, algunas tenemos los pies difíciles. Si sabes de antemano que vas a llevar esos zapatos nuevos durante muchas horas en un evento especial, adáptalos a la forma de tu pie dando pequeños paseos con ellos puestos por casa y déjalos puestos mientras ves la televisión o lees un libro. Algunos materiales, como el tafilete o un cuero suave, se adaptarán a tu pie en pocas horas y así evitas el riesgo de rozaduras o ampollas el día que los estrenes de verdad.
- Si no estás acostumbrada a usar tacones o si sufres de sobrepeso, plantéate la posibilidad de aliviar la carga de los pies con unas cuñas o con tacones que lleven un poquito de plataforma, para disminuir la pendiente del pie, que es lo que determina cómo se concentra el peso.
Además de estos consejos, también puedes optar por unas plantillas de gel para tacones, como las de Scholl, que gracias a su tecnología GelActiv proporcionan comodidad y previenen el deslizamiento del pie, para que puedas usar tus tacones sin molestias siempre que quieras.
Scholl fabrica plantillas de gel de diferentes tamaños y diseños, para ser invisibles con cualquiera que sea el calzado que uses. Lo ideal es tener unas plantillas de gel para sandalias y otras para calzado cerrado, pues estas últimas pueden lograr que sientas que caminas sobre algodones durante todo el día.
Por último, aunque hay tacones comodísimos, recuerda que los traumatólogos aconsejan no usar tacones de más de 5 cm a diario, y alternarlos con modelos más bajos o cuñas con poca elevación en el talón. Así se evita el acortamiento de las tibias y de algunos ligamentos con el paso de los años. Aunque el calzado completamente plano, con el tobillo a ras de suelo, tampoco suele ser recomendable para uso diario.
El calzado ideal eleva el talón entre 2 y 4.5 cm. Recuerda que los tacones de 10 cm en adelante deberían usarse de manera puntual, en especial si no tienen un tacón ancho con forma de T, que permita que el talón siga soportando un porcentaje relativamente significativo del peso corporal.
También existen plantillas de gel para calzado plano, creadas para profesionales que deben pasar muchas horas seguidas de pie sin caminar. Pregunta en tu farmacia o parafarmacia de confianza
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